Terapias para ayudar a los trabajadores lesionados a gestionar los efectos psicológicos de las lesiones

Además del dolor y las limitaciones físicas, las lesiones laborales también pueden causar importantes traumas emocionales y psicológicos que pueden durar mucho tiempo después de que la lesión se haya curado. Por eso es importante que las personas que han sufrido lesiones y traumas laborales no sólo busquen tratamiento médico, sino que también consideren los beneficios de buscar apoyo psicológico y terapia. En este artículo, exploraremos las terapias disponibles para las personas traumatizadas por lesiones laborales, así como las pruebas que respaldan su eficacia.

Existen varias terapias disponibles para las personas traumatizadas por lesiones laborales, entre las que se incluyen las siguientes:

La terapia cognitivo-conductual (TCC) es una forma de terapia conversacional que se centra en cambiar los patrones negativos de pensamiento y comportamiento que pueden contribuir a los sentimientos de ansiedad, depresión y otros síntomas del trastorno de estrés postraumático (TEPT). La TCC ha demostrado su eficacia en el tratamiento del TEPT en personas que han sufrido lesiones en el lugar de trabajo.

La desensibilización y reprocesamiento por movimientos oculares (EMDR) es una terapia que combina elementos de la TCC con movimientos oculares u otras formas de estimulación rítmica bilateral. La EMDR ha demostrado su eficacia en el tratamiento del TEPT en personas que han sufrido lesiones en el lugar de trabajo.

La terapia cognitivo-conductual centrada en el trauma (TCC-TF) es un tipo específico de TCC diseñada para abordar las necesidades específicas de las personas que han sufrido acontecimientos traumáticos, incluidas las lesiones en el lugar de trabajo. La TF-CBT suele incluir elementos de la terapia de exposición, que consiste en afrontar y procesar gradualmente los recuerdos traumáticos en un entorno seguro y de apoyo. La TF-TCC ha demostrado su eficacia en el tratamiento del TEPT en personas que han sufrido lesiones en el lugar de trabajo.

Las terapias basadas en la atención plena, como la reducción del estrés basada en la atención plena (MBSR, por sus siglas en inglés) y la terapia cognitiva basada en la atención plena (MBCT, por sus siglas en inglés), han demostrado ser eficaces para reducir los síntomas del TEPT, la depresión y la ansiedad en personas que han sufrido un trauma (por ejemplo, Kearney et al., 2016; Polusny et al., 2015). Estas terapias implican la práctica de la meditación de atención plena y otras técnicas basadas en la atención plena para aumentar la conciencia y la aceptación de los propios pensamientos, sentimientos y sensaciones físicas.

Las terapias expresivas, como la terapia artística, la musicoterapia y la terapia de danza/movimiento, pueden ser útiles para las personas que han sufrido un trauma como una forma de expresar emociones y experiencias que pueden ser difíciles de expresar con palabras. Estas terapias también pueden proporcionar una sensación de empoderamiento y control sobre el proceso de curación.

La terapia psicodinámica es una forma de terapia conversacional que se centra en explorar patrones y procesos inconscientes que pueden estar contribuyendo al malestar emocional (por ejemplo, Horowitz et al., 2018). Este tipo de terapia puede ser útil para las personas que han experimentado un trauma como una forma de comprender y procesar las implicaciones psicológicas más profundas de la experiencia.

Además de estas terapias específicas, también hay varias otras formas de apoyo y tratamiento que pueden ser útiles para las personas que han experimentado lesiones y traumas en el lugar de trabajo. Entre ellas se encuentran los grupos de apoyo, el asesoramiento entre iguales y el tratamiento farmacológico.

La búsqueda de tratamiento para las lesiones y traumas laborales puede ser un reto, ya que las personas pueden dudar en buscar ayuda debido al estigma, el miedo a perder el trabajo u otras preocupaciones. Sin embargo, la investigación ha demostrado que la búsqueda de tratamiento puede conducir a mejoras significativas en los síntomas y el bienestar general.

En general, los datos disponibles indican que existen varias terapias eficaces para las personas que han sufrido lesiones y traumas en el lugar de trabajo. Sin embargo, es importante que las personas trabajen con un profesional de la salud mental cualificado para determinar el curso de tratamiento más adecuado en función de sus necesidades y experiencias individuales.

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*NO PRETENDE SER UN CONSEJO LEGAL